Idea 12: O Pelouro. Atento a la diversidad.

El tema de hoy es la atención a la diversidad dentro del aula y los centros educativos. Cada persona es un mundo, como bien habréis comprobado a lo largo de vuestra vida, nunca vas a ser idéntico a alguien, ni siquiera dos hermanos gemelos lo son. Por todo esto no podemos tratar de exigir lo mismo a todo el mundo, no solo en contenidos académicos sino en la forma de comportarse o de enfrentarse a un problema. Cada niño o persona vive en un contexto diferentes y ha pasado por unos procesos internos y externo a sí mismo muy diferentes que van a determinar quién es, como se comporta y como ve el mundo que le rodea. Esto no es algo malo, todo lo contrario, que cada persona sea distinta nos permite disfrutar cada momento de forma distinta, si todos fuéramos iguales nos daría igual con quien estar, sería aburrido. Aunque por desgracia, es verdad que dentro del ámbito educativo esto genera problemas, sería mucho más fácil una clase de 25 alumnos iguales. Aún así como esto no ocurre debemos hacer frente a esta diversidad, ya que algunos salen perdiendo con ella mientras que otros no. ¿Qué determina que seamos "normales"? Si en el fondo todos somos distintos ¿Por qué unas personas son mejores que otras, qué tienen de diferente que les haga no ser raros? ¿Cómo hacemos frente a esta diversidad en el aula?

Esto último es lo más complicado, pero lo más interesante a la hora de hablar de diversidad. Es muy importante saber del tema cuando te encuentras dentro de un aula y saber tratar a cada uno de los alumnos sin que nadie se sienta fuera de lugar, ya que todos deben y forman parte de la clase, sean como sean. Independientemente de como de listo sea un alumno o de las capacidades que presente -sean las que sean- no podemos desestimar a nadie ni dejar que el resto de alumnos lo hagan, tenemos que formar un grupo de personas que se respeten y se traten como iguales. Que un niño presente algún tipo de diversidad funcional no implica que sea peor o que sea raro, solo hace las cosas de otra manera distinta, igual le lleva más tiempo o le cuesta más, pero tenemos que por ello adecuar los requisitos escolares y sociales que se dan en un centro educativo a como ellos hacen las cosas. Estos niños se salen de la norma, pero es que la norma no está hecha para ellos, tenemos que cambiarla en su caso. 

Dentro de estos problemas encontramos alumnos con trastornos de la personalidad, síndrome de Down o autismo entre las más comunes. Existen muchas medidas de atención a la diversidad como programas de refuerzo académico, actividades de integración social o protocolos de actuación con padres y/o especialistas. Desde la Junta de Castilla y León se han promovido diferentes programas como ALISO, y además cada centro educativo dispone actualmente de muchas herramientas para favorecer una mayor integración en el aula. Es fundamental que el centro y los profesores del centro se conciencien y estén dispuesto a la colaboración para crear un mejor ambiente en la clase, dando el apoyo necesario a estos alumnos para que no se sientan excluidos. 

En esta actividad de reflexión yo me he decantado por comentar la experiencia educativa del centro O Pelouro. Es un centro educativo de Tui (Pontevedra) y se denominan a sí mismo como una escuela centrada en el Niño. Lo que se busca en esta escuela es que por encima de cumplir con los requisitos y metas impuestas por la Xunta de Galicia y el Ministerio de Educación, quieren que se deasarrolle la personalidad del niño, que este conozca sus propios sentimientos, que sea curioso y se interese por lo que le rodea y por aprender más. En clase vimos un documental -aquí os dejo el link- me dejó impactado como los niños a su edad podían expresar tan bien el desarrollo de proyectos y otras muchas actividades que desarrollaban en clase. 

Respecto a la atención a la diversidad, este centro se define como "una escuela para todo niño, para los que son normales y para los que presentan variaciones neurocognitivas que afectan al desarrollo". Valoran la diversidad como riqueza y que hay que convivir con ella, están muy comprometidos con la causa. Una profesora del vídeo comenta cómo los niños deben convivir con todo tipo de diversidad para aprender que los límites no están establecidos y que no hay que excluir a nadie. Al final todos podemos aprender del otro. Yo he convivido en el colegio con niños con diversidad funcional de diversos tipos y sí, a veces son niños problemáticos, gritan, hacen ruido, pegan, lloran; pero... todos lo somos, solo que como somos "normales" le damos menos importancia. Lo bonito de mi experiencia con estos niños ha sido como al salir del colegio me he encontrado con una de ellas, una niña llamada Laura con síndrome de Down y ver como había crecido, que aunque fue duro para ella ha salido adelante como cualquier otra persona, eso me hizo muy feliz.